La integración del Sistema Financiero Nacional (SFN) en Ecuador juega un papel esencial en la planificación, ejecución y control de las finanzas públicas. El Código Orgánico Monetario y Financiero (COMF) establece que este sistema está conformado por instituciones del sistema financiero público, privado, popular y solidario, incluyendo al Banco Central del Ecuador (BCE), las instituciones de control (como la Superintendencia de Bancos y la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria), así como otras entidades auxiliares.
El BCE, como ente técnico y autónomo, tiene un rol clave en la integración del sistema financiero. Según el artículo 57 del COMF, le corresponde administrar la liquidez de la economía, emitir política monetaria en un contexto dolarizado, y actuar como agente financiero del Estado. Esto le permite centralizar operaciones del sector público, facilitando la ejecución del Presupuesto General del Estado (PGE) y garantizando que los recursos públicos circulen de forma eficiente, transparente y bajo control.
La articulación entre entidades públicas y privadas del SFN también incide en la ejecución del PGE. Por ejemplo, cuando el Estado requiere financiamiento interno, puede recurrir a bancos privados mediante emisión de bonos u otros instrumentos. A su vez, los pagos de programas sociales como el Bono de Desarrollo Humano se canalizan por instituciones financieras privadas y cooperativas, mostrando cómo esta integración mejora el alcance de las políticas públicas.
Además, la Junta de Política y Regulación Financiera, establecida por el COMF, establece normas para la estabilidad del sistema, lo que incide directamente en el control del gasto y la inversión pública.
En suma, un sistema financiero integrado permite una mejor planificación macroeconómica, una ejecución presupuestaria más fluida y mecanismos de control más robustos que aseguran la transparencia en el uso de los recursos públicos.