es muy completo y resalta con claridad el papel estratégico de la articulación público-privada dentro del Sistema Financiero Nacional, especialmente en relación con la ejecución del Presupuesto General del Estado. Coincido plenamente contigo en que esta coordinación ha sido crucial en momentos de crisis, como en 2020, cuando el BCE y la banca pública ayudaron a mantener la estabilidad económica a través de créditos y transferencias.

Me parece muy acertado que destaques el uso de canales alternativos como cooperativas en zonas rurales, ya que son fundamentales para lograr cobertura territorial. Sin embargo, creo que también sería interesante incorporar cómo la transformación digital puede cerrar brechas de inclusión financiera, especialmente con el uso de billeteras electrónicas o plataformas como BIMO, impulsadas por el BCE. A pesar de su bajo uso inicial, representan una oportunidad para conectar al sistema financiero con los sectores históricamente excluidos.