La comunicación digital puede verse interrumpida en varios momentos por factores técnicos, humanos o contextuales. Por ejemplo:
1. Fallas de conexión a internet
- Cuando una o ambas partes pierden la señal.
- La velocidad lenta o inestable afecta videollamadas, cargas de archivos, o mensajes en tiempo real.
2. Problemas con plataformas o servidores
- Caídas de servicios como Zoom, WhatsApp, Gmail o redes sociales.
- Errores del sistema, mantenimiento programado o ciberataques.
3. Fallas técnicas en dispositivos
- Micrófono, cámara o teclado que no funciona correctamente.
- Pantallas congeladas o reinicios inesperados.
4. Ruido digital o interferencias
- Mala calidad de audio o eco en llamadas.
- Retrasos (lag) en la transmisión de voz o video.
5. Mensajes no entregados o mal interpretados
- Correos que llegan a spam.
- Mensajes cortos, sin contexto o con errores que causan malentendidos.
6. Barreras tecnológicas o de acceso
- Personas con poca alfabetización digital o sin dispositivos adecuados.
- Dificultad para usar aplicaciones nuevas o complejas.
7. Sobrecarga de información
- Tantos mensajes, correos o notificaciones que no se responde con claridad o se omite información relevante.
8. Diferencias de idioma o cultura
- Uso de jergas, siglas o emojis que no todos entienden igual.
- Traducciones automáticas incorrectas.
9. Falta de lenguaje no verbal
- La ausencia de tono de voz, gestos o expresiones puede generar ambigüedad o frialdad en el mensaje.
- Personas que leen sin responder, o que están distraídas durante videollamadas.
- Respuestas automáticas sin leer el contenido original.