Desde mi punto de vista como paciente, me parece que la intervención realizada en la terapia de pareja estuvo muy bien estructurada y dirigida, ya que permitió que ambos miembros tuvieramos la oportunidad de expresarnos y de reflexionar sobre los conflictos y necesidades mutuas. Considero que cada una de las técnicas aplicadas, como la exploración de la comunicación, la identificación de patrones disfuncionales y el fortalecimiento del vínculo emocional, fueron fundamentales y generaron un impacto positivo como pareja. Además, la manera en que se implementaron actividades específicas, como ejercicios de diálogo o la creación de acuerdos, ayudó a que ambos nos sintieramos cómodos para expresar emociones y puntos de vista, lo cual es importante para el éxito del proceso. Aunque el trabajo con parejas puede ser especialmente desafiante debido a la complejidad de las dinámicas interpersonales y la presencia de tensiones acumuladas, me parece que la terapeuta lo manejó de manera adecuada, mostrando empatía y manteniendo el control de la sesión incluso en momentos de tensión.