El currículo no debe ser solo una lista de materias, sino que también debe ayudar a que los estudiantes crezcan en muchas áreas: no solo en lo académico, sino también en lo emocional, social, físico y ético. Además, el currículo debe enseñar habilidades importantes como pensar bien, ser creativo y resolver problemas, porque estas cosas son necesarias para enfrentar los retos de hoy.

Por otra parte, me gusta la idea de que el currículo debe ser un plan completo, no solo varias materias separadas. De esta manera, los estudiantes no solo aprenden contenidos, sino también habilidades que les servirán en la vida y en su trabajo.