La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo (Freire, 1996). En este sentido, la permanencia de un modelo pedagógico tradicional en la Unidad Educativa Capitán Edmundo Chiriboga puede influir negativamente en el desarrollo de competencias críticas y creativas en los estudiantes de Bachillerato General Unificado. Los enfoques tradicionales, centrados en la enseñanza memorística y la repetición de contenidos sin una reflexión profunda, limitan la capacidad de los estudiantes para cuestionar, analizar y proponer soluciones innovadoras ante los problemas que enfrentan.
Un modelo pedagógico tradicional no fomenta el desarrollo de habilidades cognitivas superiores, como el pensamiento crítico, que requiere que los estudiantes no solo absorban información, sino que también sean capaces de evaluarla, contrastarla y aplicarla en diferentes contextos. Del mismo modo, el pensamiento creativo se ve restringido, ya que los estudiantes no tienen la libertad ni los recursos pedagógicos para explorar ideas nuevas o plantear alternativas a los enfoques convencionales.
Un modelo pedagógico tradicional no fomenta el desarrollo de habilidades cognitivas superiores, como el pensamiento crítico, que requiere que los estudiantes no solo absorban información, sino que también sean capaces de evaluarla, contrastarla y aplicarla en diferentes contextos. Del mismo modo, el pensamiento creativo se ve restringido, ya que los estudiantes no tienen la libertad ni los recursos pedagógicos para explorar ideas nuevas o plantear alternativas a los enfoques convencionales.