Este video nos introduce de manera clara y sencilla en el mundo de la investigación científica, explicando por qué es tan importante y cómo se organiza. Nos recuerda que investigar no es simplemente buscar información, sino un proceso riguroso, ordenado y sistemático para entender mejor un problema o fenómeno.

 ¿Qué es investigar?

Investigar significa preguntarnos, observar, analizar y buscar respuestas con base en evidencia. Ya sea en ciencias, salud, educación o cualquier área, la investigación nos permite avanzar y mejorar la vida de las personas.

Enfoque Cuantitativo

Este tipo de investigación se enfoca en los números, las cantidades y los datos medibles. Aquí se busca comprobar teorías, identificar patrones y sacar conclusiones generales. Es como usar una lupa matemática para entender la realidad.

• Usa encuestas, experimentos, pruebas estadísticas.
• Ideal para estudiar grandes poblaciones o comparar resultados.
• Busca ser objetivo, preciso y replicable.

Enfoque Cualitativo

En cambio, el enfoque cualitativo se centra en los significados, las experiencias y las emociones. Aquí no se trata de contar, sino de comprender en profundidad lo que las personas piensan, sienten y viven.

• Utiliza entrevistas, observaciones, grupos focales.
• Aporta una mirada más cercana y humana al fenómeno.
• Es ideal cuando se quiere entender el "por qué" de algo.

Similitudes

Tanto el enfoque cuantitativo como el cualitativo:

• Parten de preguntas claras.
• Siguen un proceso organizado.
• Se basan en evidencias reales.
• Buscan generar nuevo conocimiento útil.

 ¿Cuál es mejor?

Ninguno es mejor que otro. Cada enfoque tiene su función y su espacio, dependiendo del problema que se quiere investigar. Lo importante es saber cuándo y cómo usar cada uno.

 Conclusión

Conocer la investigación y sus enfoques nos permite aprender a investigar correctamente, ser más eficientes y tomar decisiones con base en evidencias. Saber cuándo aplicar un enfoque cuantitativo o cualitativo nos ayuda a trabajar de forma más rápida, organizada y efectiva.

Recordemos que ambos enfoques son útiles: no compiten entre sí, se complementan. Elegir uno u otro depende del objetivo de nuestro estudio y del área en la que trabajamos.