Tu aporte ofrece una visión muy completa y técnica sobre la estructura e impacto del Sistema Financiero Nacional (SFN) en la gestión de las finanzas públicas. Coincido plenamente contigo en que el rol del Banco Central del Ecuador (BCE) ha sido crucial, especialmente en contextos críticos como la pandemia, donde su capacidad de articular con la banca pública y privada permitió implementar políticas de protección social con rapidez y eficiencia.

Me parece muy acertado que destaques el desafío de la inclusión financiera como un obstáculo estructural. A pesar de los avances en digitalización, como el uso del dinero electrónico y las billeteras móviles, la falta de acceso a servicios financieros en zonas rurales continúa siendo un limitante. De hecho, según el informe de la ENIF 2022, cerca del 40% de los adultos en Ecuador aún no utilizan servicios financieros formales, lo cual debilita la capacidad del Estado para canalizar recursos y fomentar la equidad.

Considero también importante el papel de las superintendencias, que no solo regulan, sino que promueven confianza en el sistema. Una supervisión rigurosa y oportuna es clave para evitar escenarios de crisis como el ocurrido en 1999.

Gracias por tu análisis tan completo. Refuerza la idea de que un SFN bien integrado no solo gestiona recursos, sino que potencia el impacto social de las políticas públicas.