La programación fiscal es una herramienta fundamental en la gestión de las finanzas públicas del Ecuador, ya que permite planificar, coordinar y evaluar de manera anticipada el uso eficiente de los recursos públicos. Su principal utilidad radica en establecer un marco macrofiscal sostenible que asegure el equilibrio entre ingresos y gastos públicos, contribuyendo a la estabilidad económica del país. A través de esta programación, se proyectan variables clave como el crecimiento económico, la inflación, el precio del petróleo, el déficit fiscal y el nivel de endeudamiento, lo cual permite definir límites de gasto responsables.
Además, sirve como base para la formulación del Presupuesto General del Estado, alineando la política fiscal con los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo. También fortalece la transparencia y la disciplina fiscal, facilitando el monitoreo de los compromisos fiscales y el cumplimiento de las reglas macrofiscales establecidas por la Ley Orgánica de Planificación y Finanzas Públicas (LOPFP).
En resumen, la programación fiscal no solo guía el manejo prudente de los recursos públicos, sino que también proporciona previsibilidad a los agentes económicos, garantiza la sostenibilidad fiscal en el mediano plazo y promueve una mayor confianza ciudadana e institucional en la gestión pública.