Los ácidos carboxílicos se utilizan ampliamente en distintas industrias debido a sus propiedades químicas versátiles. Algunas aplicaciones destacadas son:
- Industria farmacéutica: El ácido acetilsalicílico (derivado del ácido salicílico) es el principio activo de la aspirina, un medicamento analgésico y antiinflamatorio ampliamente utilizado.
- Industria alimentaria: El ácido acético se usa como conservante y saborizante, especialmente en el vinagre. Además, el ácido benzoico y sus sales se emplean como conservantes en alimentos y bebidas.
- Fabricación de plásticos y polímeros: El ácido tereftálico es un componente clave en la producción del plástico PET (tereftalato de polietileno), usado en envases y botellas.
- Cosmética y productos de higiene: El ácido láctico se usa en cremas exfoliantes, tratamientos de piel y productos para equilibrar el pH de la piel.
Estas aplicaciones muestran la importancia de los ácidos carboxílicos no solo a nivel químico, sino también en el desarrollo de productos de uso cotidiano.