El diseño tridimensional en joyería permite representar con precisión las formas, proporciones y detalles de una pieza antes de fabricarla. Facilita la visualización realista del diseño, mejora la toma de decisiones estéticas y funcionales, y reduce errores en la producción, optimizando tiempo y recursos. Además, permite experimentar con materiales, acabados y mecanismos complejos que serían difíciles de proyectar en un boceto plano. También es fundamental para procesos como la impresión 3D o el modelado en cera, lo que agiliza el paso del diseño a la producción con mayor exactitud y control.