Compañera Emily 

Gracias por compartir tu reflexión. Me parece muy valioso cómo expresas el dolor y la indignación que dejó la colonización en nuestros pueblos originarios. Coincido contigo en que los abusos, la imposición de creencias y las consecuencias como las enfermedades y los trabajos forzados fueron actos profundamente injustos. Es importante reconocer que estos hechos no solo marcaron el pasado, sino que todavía tienen repercusiones en la identidad y las condiciones actuales de muchos pueblos indígenas.

Estoy de acuerdo en que el gesto del papa Francisco al pedir perdón fue importante. Aunque no cambia la historia, sí muestra una voluntad de reconocer el daño y avanzar hacia la reconciliación. En cambio, la negativa del rey de España a disculparse puede interpretarse como una falta de sensibilidad y empatía histórica.

Una disculpa oficial no borra el sufrimiento, pero sí puede ser un acto simbólico necesario. Por eso, comparto contigo la idea de que sería justo y ético que España también pidiera perdón de manera clara y directa.