Jahaira Armijos menciona en su comentario que la familia es fundamental para construir el lenguajes ya que eso deriva un aprendizaje basado en la identidad cultural, creando vínculos de pertenencia, desde mi punto de vista. La familia es una de las principales influencias en la construcción de nuestra identidad lingüística.
Desde la infancia, el hogar es el primer espacio donde aprendemos a comunicarnos, y el lenguaje que usamos con nuestra familia moldea nuestra forma de expresarnos, pensar y relacionarnos con el mundo.
Dentro de cada familia, surgen expresiones únicas, apodos y códigos lingüísticos que fortalecen la identidad compartida. Frases, dichos o formas particulares de hablar crean un sentido de pertenencia y conexión.
El lenguaje en la familia también transmite valores, creencias y perspectivas sobre el mundo. Desde cómo se habla sobre temas sociales hasta el tono de las conversaciones, el lenguaje familiar refuerza una identidad cultural y emocional.
Desde la infancia, el hogar es el primer espacio donde aprendemos a comunicarnos, y el lenguaje que usamos con nuestra familia moldea nuestra forma de expresarnos, pensar y relacionarnos con el mundo.
Dentro de cada familia, surgen expresiones únicas, apodos y códigos lingüísticos que fortalecen la identidad compartida. Frases, dichos o formas particulares de hablar crean un sentido de pertenencia y conexión.
El lenguaje en la familia también transmite valores, creencias y perspectivas sobre el mundo. Desde cómo se habla sobre temas sociales hasta el tono de las conversaciones, el lenguaje familiar refuerza una identidad cultural y emocional.