En fisioterapia, la valoración es el proceso clave para conocer el estado del paciente y planificar su tratamiento. Existen varios tipos de valoración fisioterapéutica, y suelen clasificarse en función del enfoque, la técnica o el objetivo.
VALORACIÓN SUBJETIVA
Es la primera parte de la valoración fisioterapéutica y se basa en la información que el paciente comunica. Se obtiene a través de la entrevista clínica y el diálogo.
Objetivos:
- Conocer el motivo de consulta.
- Obtener antecedentes médicos relevantes.
- Entender cómo afecta el problema a la vida diaria.
- Evaluar el dolor, su localización, frecuencia, intensidad y factores que lo agravan o alivian.
Elementos clave:
- Datos personales: edad, profesión, actividad física, etc.
- Historia clínica: lesiones previas, cirugías, enfermedades crónicas.
- Inicio y evolución de los síntomas.
- Dolor: se puede usar la escala visual analógica (EVA) para medir su intensidad (0-10).
- Limitaciones funcionales: qué actividades no puede hacer o hace con dificultad.
- Expectativas del paciente respecto al tratamiento.
VALORACIÓN OBJETIVA
Es la parte en la que el fisioterapeuta observa, mide y evalúa físicamente al paciente. Se buscan signos clínicos, alteraciones funcionales o estructurales.
Objetivos:
- Identificar alteraciones biomecánicas o neuromusculares.
- Evaluar el estado funcional del aparato locomotor.
- Cuantificar movilidad, fuerza, postura, sensibilidad, etc.
Herramientas y pruebas frecuentes:
- Inspección visual: simetría, inflamación, coloración, deformidades.
- Palpación: tono muscular, puntos gatillo, calor local.
- Rango de movimiento (ROM): activo y pasivo, usando goniometría.
- Fuerza muscular: Escala de Daniels (0 a 5).
- Pruebas ortopédicas: como Test de Neer, Test de Lachman, Test de Phalen, etc.
- Evaluación neurológica: reflejos, sensibilidad superficial/profunda, coordinación.
VALORACIÓN FUNCIONAL
Evalúa la capacidad del paciente para desenvolverse en su vida diaria, tanto en movimientos básicos como complejos.
Objetivos:
- Determinar el nivel de autonomía e independencia del paciente.
- Identificar limitaciones funcionales reales.
- Medir el impacto del problema físico en las actividades cotidianas.
Actividades evaluadas:
- Marcha (caminar, velocidad, coordinación).
- Equilibrio (estático y dinámico).
- Subir/bajar escaleras.
- Levantarse de una silla.
- Transferencias (cama-silla, suelo-silla).
- Manipulación de objetos.
Bibliografía:
- Gómez J, Sala M, Cazorla J. VALORACIÓN EN FISIOTERAPIA. BRADU [Internet]. 2019; Available from: https://bradu.es/sites/default/files/resumen/VALORACION%20EN%20FISIO_DEMO_0.pdf