TIUTLO: Chicos de ASADI aprendieron sobre germinación de plantas nativas
FECHA: 20 de abril del 2025
REFLEXIÓN:
La jornada educativa que la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable compartió con la Asociación Sureña de Ayuda al Discapacitado (ASADI) representa mucho más que una actividad ambiental. Es un claro ejemplo de cómo la inclusión social y el respeto por la naturaleza pueden unirse para transformar vidas y comunidades. Involucrar a jóvenes con discapacidad en procesos como la germinación y siembra de plantas nativas no solo les permite adquirir nuevos conocimientos, sino que les brinda la oportunidad de ser protagonistas en la protección de su entorno.
Este tipo de iniciativas promueven una conciencia ambiental que nace desde la participación activa y el contacto directo con la tierra. Ver crecer una semilla sembrada por sus propias manos fortalece el sentido de pertenencia y responsabilidad hacia el ambiente. Además, demuestra que todos, sin importar sus capacidades, tienen un rol valioso en la construcción de un futuro sostenible.
Es admirable que la educación ambiental se proponga como herramienta de inclusión, acercando a estos jóvenes a una experiencia que combina aprendizaje, trabajo en equipo y cuidado de la biodiversidad. Estas acciones también consolidan un mensaje esencial: proteger la naturaleza es una tarea de todos y para todos.
Incorporar a personas con discapacidad en proyectos ambientales refuerza valores de respeto, empatía y solidaridad, mientras visibiliza su capacidad de aportar al bienestar común. Ojalá más instituciones y gobiernos repliquen estas propuestas, entendiendo que una sociedad sostenible también se construye desde la diversidad y la igualdad de oportunidades.