El documental me pareció muy interesante porque muestra cómo las redes sociales no solo sirven para conectarnos con otras personas, sino que también tienen un lado negativo que muchas veces no vemos. Lo que más me llamó la atención fue saber que estas aplicaciones están diseñadas para que no podamos dejar de usarlas fácilmente. Usan trucos como las notificaciones, los videos recomendados, etc, para mantenernos pegados a la pantalla. También habla de cómo estas plataformas nos muestran solo ciertos tipos de contenido, según lo que nos gusta o lo que más vemos. Esto puede hacer que creamos cosas falsas o que pensemos que todo el mundo piensa como nosotros. Además, afecta mucho a la salud mental, especialmente en adolescentes, porque muchas veces nos comparamos con lo que vemos en redes, aunque no representa la realidad.
Después de ver el documental, empecé a pensar más en cómo uso mi celular y las redes. Me di cuenta de que muchas veces reviso el celular sin tener un propósito claro y pierdo mucho tiempo viendo cosas que ni siquiera me importan tanto. A veces también me comparo con lo que veo, lo que me hace sentir mal. Por eso, empezaré a desactivar algunas notificaciones y limitar el tiempo que paso en redes sociales. También me hizo pensar en cómo influyen las redes en nuestras decisiones diarias, incluso sin darnos cuenta. Por ejemplo, muchas veces compramos algo solo porque lo vimos en un anuncio, o empezamos a seguir ciertas ideas solo porque las vemos repetidas muchas veces, eso demuestra lo poderoso que es el contenido que consumimos, y por eso es importante no creer todo de inmediato y seguir una moda, se debe buscar información por otros medios también y que sean verídicos.
En resumen, me ayudó a darme cuenta de que, aunque las redes tienen cosas buenas, también pueden tener consecuencias negativas si no las usamos con cuidado. Creo que es importante que más personas vean este documental para pensar en cómo usamos la tecnología y tratar de tener un uso más sano y consciente.