La valoración fisioterapéutica es un proceso clínico fundamental que permite al fisioterapeuta obtener información detallada y estructurada sobre el estado funcional del paciente. Esta fase inicial se convierte en la base para establecer un diagnóstico fisioterapéutico, planificar el tratamiento y pronosticar la evolución del paciente. Es un procedimiento sistemático que incluye la recopilación de datos subjetivos, antecedentes personales y clínicos, así como la exploración física, pruebas específicas y escalas funcionales. La correcta valoración permite identificar disfunciones musculoesqueléticas, neurológicas, respiratorias, cardiovasculares y del suelo pélvico, orientando de forma precisa las intervenciones terapéuticas.
Además, la valoración fisioterapéutica no solo se limita al momento inicial, sino que debe repetirse a lo largo del tratamiento para monitorear los cambios y ajustar las estrategias terapéuticas. Esta evaluación continua favorece la toma de decisiones basada en evidencia y garantiza la seguridad del paciente. Herramientas como goniometría, dinamometría, escalas funcionales y test clínicos validados forman parte de este proceso, aportando objetividad a los hallazgos clínicos. La adecuada interpretación de los resultados permite establecer prioridades, identificar factores de riesgo y promover una atención integral, respetando las capacidades y limitaciones individuales de cada paciente.
Bibliografía
Vargas, M. (Octubre, 2020) HISTORIA CLÍNICA Y VALORACIÓN EN FISIOTERAPIA, NPunto Volumen III. Número 31. Obtenido de: https://www.npunto.es/revista/31/historia-clinica-y-valoracion-en-fisioterapia