Donald Trump se pronuncia sobre aranceles impuestos
Fecha: 6 de abril de 2025
Lo que está haciendo Estados Unidos con este impuesto universal del 10% a las importaciones no es solo una medida económica, es una jugada política con implicaciones profundas en el orden global. Y cuando además anuncia subidas específicas contra ciertos países, lo que está en juego no es solo el comercio, sino el equilibrio de poder y el respeto al derecho internacional.
Porque sí, todo Estado tiene derecho a proteger su economía y a tomar decisiones soberanas, pero ese derecho tiene límites cuando afecta directamente a otros países sin consenso, sin diálogo y sin respetar los acuerdos internacionales vigentes. El comercio internacional no puede regirse por impulsos ni por redes sociales, sino por reglas claras, pactadas y justas.
Además, esto es política pura: se usan los aranceles como herramienta de presión, no para mejorar condiciones reales, sino para ganar influencia o castigar a quienes no se alinean con ciertos intereses y eso pone en peligro el derecho a un comercio justo, transparente y estable.
Porque en política internacional, como en todo, el derecho no puede estar subordinado a los caprichos del poder, si lo está, lo que se rompe no es solo un tratado o una relación diplomática lo que se rompe es la base misma de la convivencia entre naciones.
El derecho al comercio justo y equilibrado, el derecho a proteger tu economía existe, pero también existe la necesidad de actuar dentro de un marco legal global, saltarse las reglas, imponer condiciones y usar la economía como arma política debilita el sistema y pone en riesgo la estabilidad mundial, no se trata solo de números o negocios, se trata de respeto mutuo y de reglas compartidas porque imponer sin escuchar no es ejercer poder, es ignorar los derechos de los demás.
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