La migración se da cuando las personas se mueven de un lugar a otro. Puede ser dentro del mismo país, por ejemplo, si alguien se muda del campo a la ciudad buscando trabajo, o puede ser de un país a otro, como cuando un ecuatoriano se va a España o a Estados Unidos. Es importante saber que a la persona que llega a un nuevo lugar se le llama "inmigrante", y a la que se va de su país, "emigrante".
Además la migración no siempre es una elección feliz. A veces, la gente se va porque no le queda de otra. Por ejemplo, una de las razones más fuertes son los problemas económicos. Imaginen que no hay trabajo, o que el dinero no alcanza para nada; la gente busca un lugar donde sí pueda conseguir un empleo y mantener a su familia. Otra causa muy triste son los conflictos y las guerras. Cuando hay problemas graves en un país, la gente tiene que huir para salvar su vida, porque sus casas son destruidas o no hay comida. También puede pasar por problemas políticos, si en su país no respetan sus derechos o los persiguen por sus ideas. Y no olvidemos los desastres naturales, como terremotos, sequías o inundaciones, que pueden dejar a la gente sin nada y obligarlos a buscar un nuevo hogar.
Pero la migración no es solo irse; tiene muchas consecuencias, tanto para el que se va como para el lugar de donde viene y al que llega. Para los que migran, es un cambio gigante. Pueden sentir mucha tristeza, ansiedad o depresión por dejar todo atrás. A veces, la migración es de pocas familias, pero otras veces son muchísimas personas las que se mueven a la vez, y eso cambia la población de los países.
Para los países a donde llegan los migrantes, hay cosas buenas y malas. Por un lado, la llegada de gente nueva puede enriquecer la cultura, trayendo nuevas comidas, música y formas de ver la vida. También pueden ayudar a llenar puestos de trabajo que nadie quiere hacer o por menos dinero, y el dinero que envían a sus países de origen (las remesas) es una ayuda enorme. Sin embargo, también pueden surgir problemas como la discriminación o la xenofobia, que es el rechazo a los extranjeros, lo cual es muy triste y no debería pasar.
Para los países de donde se van las personas, como Ecuador, las consecuencias también son importantes. Si mucha gente joven y trabajadora se va, el país pierde mano de obra y talentos que podrían ayudar a su desarrollo. Las familias se separan, y los que se quedan pueden sufrir mucho por la ausencia de sus seres queridos.
También se sabe que hay diferentes tipos de migración. Puede ser interna, si te mueves dentro de tu país, o externa, si te vas a otro país. También puede ser temporal, si planeas volver, o permanente, si te quedas para siempre. Y como ya dijimos, puede ser voluntaria, si es tu decisión, o forzada, si no te queda más remedio.