Aborda el papel de una señal hormonal inducida por la hormona colesina en la regulación de la producción de colesterol por parte del hígado. El texto muestra un experimento llevado a cabo por Nick Norwitz, investigador vinculado a Harvard, quien desafió mitos comunes sobre el consumo de colesterol al incluir una gran cantidad de huevos en su dieta diaria.

El autor observó que, pese a consumir 720 huevos en un mes, sus niveles de colesterol LDL disminuyeron. Este resultado se atribuye a una respuesta hormonal del cuerpo, en la que la colesina desempeña un rol clave al activar una señal en las células intestinales que indica al hígado reducir su producción endógena de colesterol.

El artículo también destaca que la reducción de carbohidratos refinados, combinada con una ingesta moderada de frutas, puede tener efectos positivos sobre el perfil lipídico, especialmente en personas con ciertas características metabólicas. Este enfoque integral evidencia que no es solo la grasa dietética la que impacta los niveles de colesterol, sino la interacción compleja entre hormonas, tipo de nutrientes y metabolismo individual.