Hola Danny podría decirte que en un mundo cada vez más competitivo y lleno de expectativas sociales, ayudar a los jóvenes a descubrir lo que realmente desean estudiar se ha vuelto un desafío crucial. Como educadores, orientadores o padres, es esencial comprender que cada joven tiene un ritmo, una historia y una vocación única. Muchas veces, las decisiones académicas se ven influenciadas por presiones externas: el prestigio de ciertas profesiones, las expectativas familiares, o incluso la idea de “éxito” impuesta por la sociedad. Frente a esto, debemos promover una educación centrada en el ser, no solo en el hacer.Es necesario brindarles herramientas para conocerse a sí mismos: espacios de reflexión, actividades que despierten su curiosidad, acompañamiento emocional y, sobre todo, tiempo.