Sí, la constitución de compañías societarias en el Ecuador representa una fuente efectiva de empleo formal y sostenible, especialmente gracias a reformas como la introducción de la Sociedad por Acciones Simplificada (S.A.S.), que ha facilitado la formalización de negocios mediante procesos ágiles y digitales, sin necesidad de capital mínimo.
Desde lo normativo, la Ley de Compañías y la Constitución promueven el desarrollo productivo y el empleo, mientras que el Código del Trabajo garantiza derechos para los trabajadores en empresas legalmente constituidas. Esto permite que al formalizarse, los emprendimientos generen empleos con estabilidad y beneficios sociales.
Sin embargo, para que estas compañías realmente contribuyan a un empleo sostenible, se necesita un entorno favorable: acceso a financiamiento, incentivos y apoyo institucional. Por tanto, aunque no es la única solución, el régimen societario es un mecanismo importante para dinamizar la economía y fomentar empleo de calidad.