Impacto local del cambio climático.

En mi comunidad, hemos observado cómo las variaciones climáticas han afectado directamente nuestras actividades cotidianas, especialmente en el ámbito agrícola. Antes, las lluvias llegaban en épocas predecibles, lo que permitía organizar las siembras de forma eficiente. Sin embargo, ahora los períodos de sequía o lluvias intensas son cada vez más irregulares, lo que genera pérdidas en cultivos y dificulta la planificación. Este cambio no solo impacta a los agricultores, sino también a los mercados locales y a la seguridad alimentaria. Además, los eventos extremos como inundaciones han dañado caminos rurales, impidiendo el acceso a servicios básicos. Estos ejemplos muestran que el cambio climático no es un problema lejano ni teórico, sino una realidad que ya nos afecta. Por eso, es urgente adoptar medidas de adaptación, como tecnologías sostenibles y educación ambiental, para fortalecer la resiliencia de nuestras comunidades ante este fenómeno.