Los números reales están presentes en casi todos los aspectos de nuestra vida diaria. Los usamos al hacer compras, cocinar, medir distancias, calcular tiempo y manejar el dinero, entre muchas otras actividades. Por ejemplo, cuando vamos al supermercado, usamos números decimales para conocer el precio de los productos. Si un litro de leche cuesta $1.75, ese número es un decimal que representa una cantidad exacta de dinero.

Los números enteros también son muy comunes. Los usamos, por ejemplo, al contar objetos o personas. Si tienes 3 hermanos o ves que hay 12 autos en el estacionamiento, estás usando números enteros. También aparecen al marcar la hora en el reloj, al contar los días de la semana o al anotar goles en un partido.

Las fracciones, por su parte, son útiles en actividades como cocinar. Si una receta dice que se necesita ½ taza de azúcar, estás usando una fracción para medir una parte de un todo. También se usan al dividir algo entre personas, como repartir una pizza entre 4 amigos, donde cada uno recibe ¼.

En resumen, los números reales nos rodean constantemente y nos ayudan a organizar, medir y tomar decisiones en la vida cotidiana.