Escribir un artículo científico requiere una mezcla de precisión, metodología y
transparencia. Primero, es fundamental establecer un enfoque claro, utilizando términos técnicos,
pero evitando confusiones, y organizando el contenido según la estructura clásica (Introducción,
Métodos, Resultados y Discusión). La solidez del estudio se basa en datos verificables,
procedimientos detallados (para que otros puedan replicarlos) y análisis que estén libres de
sesgos.
El trabajo debe ofrecer algo nuevo a su campo, justificando su relevancia desde el
principio. Hay que recordar que para lograr un análisis más exacto hay que procesar la información
“Escribir no es decir lo que se sabe: leer no es extraer lo que el texto dice” (Paula, 2022). En
cuanto a la integridad académica, es esencial dar crédito a las fuentes utilizadas, evitar el plagio y
aclarar cualquier interés personal o financiero que pueda influir en los resultados. La presentación
sigue un formato específico: un título claro, un resumen conciso (que incluya objetivos, técnicas y
hallazgos), desarrollo por secciones temáticas y una bibliografía estandarizada. “En el contexto
académico y científico, la organización y la planificación temporal desempeñan un papel
fundamental en el proceso de escritura y publicación de artículos científicos” (Arias Carrión, 2023).
Antes de publicar, es importante revisar el texto, compartirlo con colegas para recibir sugerencias
y asegurarse de que cumple con los requisitos de la revista elegida. Por ejemplo, una investigación
sobre un nuevo material debería detallar cómo se fabricó, qué pruebas se realizaron y cómo se
comparan sus propiedades con las alternativas existentes.
Referencias
Arias Carrión, O. (2023). Guía para escribir un artículo científicoGuide to write a scientific article.
Revista Española de Geriatría y Gerontología, 59(1Paula, C. (2022). Leer y escribir en la universidad. Textos y contexto