Intervención fisioterapéutica según la CIF:
1. Evaluación según la CIF:
El fisioterapeuta recoge información en cada uno de los componentes:
Ejemplo: Paciente con artrosis de rodilla
Estructura afectada: articulación de la rodilla
Función alterada: movilidad limitada, dolor
Actividad afectada: dificultad para caminar
Participación limitada: no puede ir al trabajo
Factores contextuales: vive en un tercer piso sin ascensor
2. Establecimiento de objetivos
Basados en mejorar la función, actividad y participación.
Ejemplo: Aumentar el rango de movimiento de rodilla para permitir al paciente subir escaleras y volver al trabajo.
3. Plan de intervención
Incluye técnicas como:
Terapia manual, ejercicios terapéuticos, educación en el dolor, adaptaciones del entorno.
También puede incluir la coordinación con otros profesionales (médicos, terapeutas ocupacionales, etc.).
4. Revaloración y seguimiento
Se evalúa el progreso no solo del dolor o fuerza, sino también de la capacidad del paciente para realizar sus actividades y participar activamente en su entorno.
Ventajas de usar la CIF en fisioterapia:
Enfoque integral y centrado en la persona.
Mejora la comunicación entre profesionales.
Facilita un tratamiento personalizado y más humano.
Permite documentar de forma estandarizada los avances del paciente.