La patología y el diagnóstico clínico son dos pilares fundamentales de la medicina que trabajan de manera complementaria. Debido a que con la patología se obtiene conocimiento profundo sobre los cambios estructurales y funcionales que ocurren en el organismo debido a una enfermedad, en cambio, por su parte, el diagnóstico clínico se basa en la observación, la entrevista con el paciente, la exploración física y las pruebas complementarias para identificar la enfermedad presente.
Por esto mediante del diagnóstico médico permite el abordaje adecuado de muchas enfermedades infecciosas, especialmente en zonas endémicas como: regiones tropicales, rurales o con condiciones sanitarias deficientes, algunos de sus aportes para facilitar el diagnostico medico son:
1. Detección de enfermedades parasitarias
La parasitología se encarga del estudio de parásitos que afectan al ser humano, incluyendo protozoos (Entamoeba histolytica), helmintons y artrópodos .Estos organismos pueden causar síntomas diversos: diarreas, anemia, fiebre, problemas neurológicos, entre otros. El diagnóstico médico depende del conocimiento parasitológico para identificar la causa exacta.
2. Selección del tratamiento adecuado
Cada parásito requiere un tratamiento específico, es decir, sin un diagnóstico preciso basado en técnicas parasitológicas (coproparasitario, frotis sanguíneo, serologías), el tratamiento puede fallar o incluso empeorar la condición del paciente.