La didáctica del entorno natural y social es fundamental en la formación de los niños y niñas, ya que les permite comprender el mundo que los rodea desde una perspectiva crítica, participativa y activa. Considero que esta área no solo promueve el aprendizaje de conceptos científicos y sociales, sino que también fomenta valores como el respeto por el medio ambiente, la diversidad cultural y la responsabilidad ciudadana. Como futuros docentes, es clave que aprendamos a diseñar experiencias significativas que conecten los contenidos con la realidad del alumnado, aprovechando su curiosidad natural para explorar y construir conocimiento desde su contexto.