Concepto: Es una forma de pensar que se basa en lo que es directamente observable tangible y literal. Las personas que usan el pensamiento concreto tienden a enfocarse en hechos, objetos, acciones y experiencias reales, más que en ideas abstractas, teorías o metáforas.
Ejemplo: Memorizar formulas matemáticas:
Un estudiante con pensamiento concreto podría memorizar fórmulas matemáticas pero tener dificultades para entender los conceptos subyacentes o para aplicar las fórmulas en diferentes contextos.