Andrés es un niño que presenta TDAH, lo que conlleva la presencia de conductas desadaptativas en diversos ambientes como la escuela, su hogar o el consultorio.
Las conductas desadaptativas que Andrés muestra son: conductas disruptivas, ya que durante la entrevista rompe con la armonía e interrumpe constantemente la comunicación entre su madre y la profesional, afectado el desarrollo de la sesión, llegando incluso a ser una problemática dentro del ambiente escolar de Andrés; además, presenta conductas impulsivas ya que constantemente realiza acciones sin una reflexión previa, llegando a tomar cosas que no debería y haciéndolas caer por accidente, molestando e interrumpiendo el flujo de la conversación nuevamente.
Por otro lado, Andrés también presenta una serie de conductas adaptativas que le permiten interactuar con el ambiente. Este tipo de conductas se implican la capacidad de aprender y aplicar normas y valores, por lo que Andrés considera estos aspectos y desarrolla actividades que permiten la sublimación de la hiperactividad e impulsividad a través del deporte, el arte y el juego, lo que le permite interactuar de manera adecuada con los demás.