Estoy de acuerdo contigo, la arquitectura tiene un impacto no solo en el entorno, sino también en las emociones y la calidad de vida de las personas. La forma en que los espacios pueden transmitir sensaciones y adaptarse a las necesidades humanas es algo fascinante. Además, creo que la arquitectura debe adaptarse a la naturaleza, respetándola y utilizando materiales con una baja huella de carbono, ya que esto no solo ayuda a reducir el impacto ambiental, sino que también va a promover un equilibrio sostenible entre el espacio construido y el ecosistema, garantizando espacios más saludables y eficientes.
Me parece muy interesante tu admiración por la arquitectura orgánica y sostenible.
¿Hay algún arquitecto o proyecto de arquitectura orgánica y sostenible que te haya inspirado?