Las empresas llevan a cabo una estructuración para dividir las múltiples acciones o actividades que realizan de manera cotidiana para, de este modo, ser capaces de delimitar sus áreas, establecer cadenas de mando o responsabilidad y lograr una mayor cooperación y coordinación que les ayude a mejorar su labor en conjunto. Es por tanto una herramienta útil y necesaria a la hora de fijar una estrategia empresarial.
La administración funcional se refiere a un enfoque de gestión empresarial que se concentra en mejorar y optimizar las funciones internas de una organización. Esto incluye la planificación, organización, dirección y control de los procesos y recursos necesarios para alcanzar los objetivos de la empresa de manera eficiente y efectiva.