Alcalde Aquiles Álvarez lanza golpes y acusa de extorsión al presidente de Chongón
Fecha: 5 de julio de 2025
El altercado entre el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, y el presidente de la comuna Chongón, Danny Torres, ha generado preocupación en la ciudadanía. Este tipo de hechos evidencia el deterioro del diálogo entre autoridades y comunidades. Que una discusión termine casi en violencia física no solo es lamentable, sino peligroso para la institucionalidad democrática. Las autoridades deben ser ejemplo de autocontrol y respeto. Aunque Álvarez denunció un intento de extorsión, lo cual es muy grave, su forma de reaccionar no fue la más adecuada.
Las acusaciones deben canalizarse por la vía legal, no con amenazas ni enfrentamientos. La agresividad en el discurso debilita la credibilidad de cualquier gestión. Además, este hecho reaviva el debate sobre cómo el Municipio se relaciona con los sectores rurales. Las comunidades merecen ser escuchadas, especialmente cuando se trata de obras que afectan sus territorios. No puede haber desarrollo sin participación ni transparencia.
Las obras públicas deben ir de la mano con procesos de socialización respetuosos. Por otro lado, si existe corrupción o chantaje, debe sancionarse con todo el peso de la ley. Pero no se puede combatir la ilegalidad actuando con descontrol. El Guayaquil que todos queremos necesita liderazgo firme, pero también sensato y democrático. Ojalá esta situación sirva como punto de reflexión y no como precedente negativo. La política no puede convertirse en un campo de confrontación personal.