Fecha Noticia: 29/06/2025
La captura de alias "Fito" fue un punto clave y una victoria significativa para el gobierno nacional. Sin embargo, esta acción ha generado críticas, especialmente por su posible vinculación con la reciente promoción de la Ley de Inteligencia. Aunque se logró detener a uno de los objetivos militares más importantes del país, es necesario reflexionar sobre las implicaciones legales de dicha normativa.
La Ley de Inteligencia ha despertado preocupación por su potencial para vulnerar derechos constitucionales, en particular el derecho a la privacidad. Al permitir que el gobierno intercepte comunicaciones sin orden judicial, se corre el riesgo de abusos de poder y vigilancia injustificada, contrarios a los principios de un Estado de Derecho.
Además, es relevante señalar que, antes de su captura, Fito logró escapar de la Penitenciaría del Litoral. Aunque el gobierno atribuyó esta fuga a la complicidad interna, también evidencia una falta de control en puntos estratégicos del sistema penitenciario, lo que pone en entredicho la eficacia institucional en temas de seguridad.
En un inicio consideré que la captura de Fito pudo haber sido pactada. Sin embargo, al conocerse el trámite para su extradición, esta acción representa un acierto parcial del gobierno ecuatoriano.
A pesar de ello, no debe verse como una victoria definitiva. Es fundamental continuar el combate contra las organizaciones criminales, priorizando la captura de sus líderes. Detener a miembros de bajo rango no desmantela las estructuras delictivas. La estrategia debe ser integral y enfocada en neutralizar el poder de mando de estas bandas.