Las normas gramaticales son fundamentales para una comunicación efectiva y clara. El uso adecuado de los signos de puntuación, como la coma, el punto y coma, y el punto, permite separar ideas y dar ritmo al texto. Por ejemplo, la coma se utiliza para enumerar elementos o para indicar pausas breves, mientras que el punto y coma se emplea para separar oraciones relacionadas pero independientes. Además, es importante evitar errores comunes como la falta de concordancia entre sujeto y verbo, o el uso incorrecto de los tiempos verbales. Al seguir estas normas, podemos expresarnos de manera precisa y coherente, lo que facilita la comprensión y el intercambio de ideas. Sin embargo, en la era digital, la comunicación informal a través de mensajes de texto o redes sociales a menudo prescinde de estas normas, lo que puede llevar a malentendidos y confusiones. Por lo tanto, es esencial conocer y aplicar las normas gramaticales para comunicarnos de manera efectiva en diferentes contextos.