FF. AA. preocupadas por actuación de los jueces y fiscales que facilitan la libertad inmediata de miembros de grupos armados organizados
Fecha: 18 de junio, 2025
El ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, expresó su preocupación sobre la actuación de los jueces y fiscales en relación con la liberación inmediata de miembros de grupos armados organizados capturados en flagrancia. Durante su comparecencia ante la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional, Loffredo señaló que, desde el reconocimiento del conflicto armado interno en enero de 2024, las Fuerzas Armadas han cumplido un rol activo y decisivo, logrando la captura de más de 6.000 presuntos miembros de estos grupos, lo que genera desconfianza en la ciudadanía y en la propia institución militar.
El funcionario destacó que las Fuerzas Armadas han seguido los protocolos establecidos y entregado a los detenidos a la autoridad competente, sin embargo, la justicia no parece alinearse con el esfuerzo militar realizado. Loffredo subrayó que esta situación se ha repetido en numerosas ocasiones, y citó casos que han sido ampliamente cubiertos por los medios, en los que las decisiones judiciales resultan incomprensibles, afectando directamente la lucha contra el crimen organizado.
El ministro también mencionó que los errores procesales, la supuesta debilidad probatoria y los actos de sobreseimiento en estos casos no son simples equivocaciones, sino que apuntan a pactos entre el crimen, abogados corruptos y funcionarios judiciales sobornados. Este patrón ha generado una amarga desazón entre la ciudadanía, que ve cómo el sistema de justicia no responde adecuadamente ante la amenaza estructural del crimen organizado, que ha crecido bajo gobiernos que han favorecido a narcotraficantes, guerrilleros y pandilleros.
Loffredo hizo un llamado urgente para la creación de un sistema de justicia sólido, probo e íntegro, que acompañe a las instituciones en su lucha diaria y proteja efectivamente a los ciudadanos, militares y policías. En este contexto, el ministro advirtió que las Fuerzas Armadas no pueden combatir solas el crimen organizado, el cual sigue desafiando las bases del Estado ecuatoriano.