La comunicación digital puede verse interrumpida en distintos momentos, principalmente por factores relacionados con la tecnología, el contexto y la naturaleza de la interacción.
- Durante la comunicación sincrónica: En plataformas como videollamadas, mensajería instantánea o llamadas de voz, la comunicación puede verse interrumpida por fallos técnicos (problemas de conexión, cortes de internet, fallas en el software) o por la desconexión de alguno de los participantes en tiempo real.
- En la comunicación asincrónica: Al utilizar correos electrónicos, foros o mensajes que no requieren respuesta inmediata, la comunicación se interrumpe cuando hay demoras prolongadas en la respuesta, lo que puede generar pérdida de continuidad o desinterés en la conversación.
- Por sobrecarga de información: Cuando hay un exceso de mensajes o notificaciones, los participantes pueden perder información relevante, lo que interrumpe la comprensión y el flujo de la comunicación.
- Por falta de retroalimentación: Si no existe una respuesta o confirmación del receptor, especialmente en entornos digitales, se produce una interrupción en el proceso comunicativo, ya que no se sabe si el mensaje fue recibido o comprendido.
- Por barreras tecnológicas o de acceso: La falta de dispositivos adecuados, problemas de software o limitaciones en el acceso a internet pueden interrumpir la comunicación digital en cualquier momento.
- Por distracciones o multitarea: En el entorno digital, la presencia de múltiples estímulos (otras aplicaciones, notificaciones, tareas simultáneas) puede provocar que los participantes se desconecten mentalmente, interrumpiendo la atención y la interacción