La creación de la ONU fue necesaria después de la Segunda Guerra Mundial para promover la paz, el entendimiento entre los pueblos y evitar futuros conflictos, a través del diálogo y la cooperación internacional, desde la perspectiva de la Comunicación para el Cambio Social, esta institución representa un espacio donde las naciones pueden intercambiar ideas, resolver diferencias y generar consensos mediante procesos comunicativos participativos y horizontales. Es un ejemplo de cómo la comunicación puede transformar relaciones de poder, fortalecer el tejido social y empoderar a las comunidades globales para alcanzar el desarrollo sostenible. Según Gumucio-Dagron (2001), “la comunicación para el cambio social es un proceso de diálogo público colectivo y de acción para un cambio equitativo” (p. 36).
Referencia Bibliográfica:
Gumucio-Dagron, A. (2001). Making Waves: Stories of Participatory Communication for Social Change. Rockefeller Foundation.
Referencia Bibliográfica:
Gumucio-Dagron, A. (2001). Making Waves: Stories of Participatory Communication for Social Change. Rockefeller Foundation.