Los compuestos nitrogenados no proteicos (CNNP) son productos metabólicos que resultan del catabolismo de aminoácidos y ácidos nucleicos. Entre ellos destacan el ácido úrico, la urea, la creatinina y el amoníaco, cuya cuantificación en sangre y orina tiene alto valor diagnóstico en medicina clínica.
El ácido úrico, producto final del metabolismo de purinas, es esencial de medir porque niveles elevados pueden conducir a hiperuricemia, gota y están relacionados con enfermedades renales o metabólicas. La urea, generada en el ciclo de la urea en el hígado, se emplea como indicador del estado funcional renal y del balance proteico del organismo.
La creatinina proviene del metabolismo muscular y su concentración plasmática refleja de forma más estable la función glomerular, siendo crucial para el diagnóstico precoz de insuficiencia renal. El amoníaco, altamente tóxico en sangre, debe ser transformado en urea rápidamente. Su acumulación puede ser señal de trastornos hepáticos graves o defectos enzimáticos congénitos.
La evaluación clínica conjunta de estos compuestos permite detectar alteraciones en el hígado, riñones, metabolismo proteico y enfermedades hereditarias del metabolismo, lo que resalta su relevancia en el seguimiento y manejo de pacientes críticos o crónicos. Cuantificar estos compuestos no solo sirve como control rutinario, sino que también permite detectar trastornos sistémicos graves antes de que se presenten síntomas clínicos evidentes. Además, su interpretación debe siempre hacerse en conjunto para lograr una visión integral del estado metabólico del paciente.
BIBLIOGRAFIA:
- Rodwell, V. W., Bender, D. A., Botham, K. M., Kennelly, P. J., Weil, P. A. (2018). Harper: Bioquímica ilustrada (30.ª ed.). McGraw-Hill Education.