La función del psicólogo forense es aplicar los conocimientos de la psicología en contextos legales y judiciales. Su papel principal es evaluar, analizar y brindar información psicológica relevante para ayudar en la toma de decisiones dentro del sistema judicial.
Algunas de sus funciones son:
-
Evaluar a personas involucradas en procesos legales: acusados, víctimas, testigos o custodios.
-
Determinar la capacidad mental de una persona para ser juzgada o para asumir responsabilidad penal.
-
Evaluar el daño psicológico en casos de violencia, abuso o accidentes.
-
Realizar peritajes psicológicos, es decir, informes técnicos que se presentan como prueba ante un juez.
-
Asesorar a jueces, abogados y policías sobre aspectos psicológicos que puedan influir en un caso.
-
Participar en procesos de custodia, adopción o violencia familiar, emitiendo opiniones profesionales sobre lo que es mejor para los involucrados (por ejemplo, para los niños).
-
Detectar simulación o mentira, como cuando una persona finge estar enferma mentalmente para evitar una condena.