Mery Shelley escribió "Frankenstein" con la intención de hacernos reflexionar sobre cuestiones profundas y humanas. A través de la historia de Víctor Frankenstein, nos muestra las peligrosas consecuencias de dejarse llevar por la ambición y el deseo de alcanzar lo imposible. Esta obra nos invita a cuestionar qué significa ser responsable de nuestras acciones, especialmente cuando creamos algo que tiene el potencial de transformar vidas. Además, Shelley destaca cómo el rechazo y la falta de empatía pueden convertir a una persona en un "monstruo". Este concepto no se refiere solo a la apariencia física, sino a cómo el trato que recibimos de los demás puede moldear nuestra identidad y comportamiento.