La lectura, desde el punto de vista de Irene Vallejo, tiene características que trascienden lo comúnmente conocido al mencionar funciones como la sanación y la resistencia. Para ella, la lectura ha sido fundamental desde tiempos remotos hasta la actualidad, pues más allá de conservar conocimientos históricos, culturales, entre otras diversas, posee un enfoque íntimo en cuanto a la conexión con las personas, actuando como un poderoso puente mágico, llámese así, en el que puede conectar épocas, generaciones, mundos, ideales, orígenes, etc. De este modo, la lectura nos brinda la capacidad única de reflejarnos en historias que muchas veces resultan ser similares a las nuestras y que en la mayoría de casos, brindan respuestas a los gritos desesperados de cada lector.
Asimismo, la relevancia del libro frente a la tecnología y el avance mundial ha continuado su lucha y persistencia, demostrando, en comparación con las demás invenciones, que lleva consigo una gran resistencia frente a los diversos cambios que han logrado terminar con algunos. Es así como el libro ha tenido una resistencia fuerte desde la antigüedad hasta ahora, revelando su duración frente al paso de los años. Dicho de esta manera, Vallejo (2019) en su libro El infinito en un junco manifiesta que el libro ha resistido la trayectoria del tiempo, demostrando ser una obra que perdura. Siempre que hemos salido del sueño de nuestras revoluciones o de las pesadillas de nuestras crisis humanas, el libro ha permanecido presente.
Referencia
Vallejo, I. (2019). El infinito en un junco: la invención de los libros en el mundo antiguo (Vol. 105). Siruela. https://surli.cc/ibolrz