Desde mi punto de vista, la Geriatría representa una especialidad esencial dentro de las Ciencias Médicas, especialmente en una época en la que la población longeva va en aumento. El envejecimiento demográfico plantea grandes retos para los sistemas de salud, por lo que es imprescindible contar con profesionales formados específicamente para atender las necesidades físicas, emocionales y sociales de los adultos mayores. 

Esta disciplina no solo aborda las enfermedades asociadas al envejecimiento, sino que también promueve el bienestar general, la autonomía y una mejor calidad de vida en esta etapa. Por ello, considero que la Geriatría debe ocupar un lugar destacado en la educación médica y en la práctica clínica.