El Análisis Bioquímico de la Sangre
El análisis bioquímico de la sangre es una prueba que consiste en medir la cantidad de diversas sustancias químicas presentes en una muestra de sangre para evaluar el estado general de salud o detectar enfermedades. Entre las sustancias que se miden están electrolitos como sodio, potasio y cloruro; grasas; proteínas; glucosa; y enzimas. Estos parámetros permiten al médico conocer el funcionamiento de órganos como el hígado y los riñones, así como identificar trastornos metabólicos o enfermedades crónicas.
Este análisis puede realizarse de forma rutinaria o cuando el paciente presenta síntomas que requieren una evaluación específica. Los resultados se comparan con rangos normales para determinar si algún valor está alterado, lo que puede indicar condiciones como diabetes mellitus (glucosa elevada), enfermedades hepáticas (transaminasas elevadas), insuficiencia renal (creatinina y urea elevadas) o riesgo cardiovascular (colesterol y triglicéridos alterados).
¿Para qué sirve el análisis de sangre y cuándo lo solicitan?
De forma general, y más allá de la pertinencia de realizarse un análisis de sangre frecuentemente como método de prevención, los profesionales sanitarios suelen recomendar realizarse un análisis de sangre por uno de los siguientes tres motivos:
- Llegar a un diagnóstico tras realizar una historia clínica completa y exploración del paciente.
- Seguimiento y control evolutivo de enfermedades ya diagnosticadas o de los tratamientos instaurados: si son o no eficaces o si producen efectos secundarios.
- Detectar factores de riesgo que nos permitan prevenir el desarrollo de una enfermedad, a partir de determinadas edades y según unos protocolos consensuados.
¿Con qué frecuencia es recomendable hacerse un análisis de sangre?
Será su médico el que determinará cuándo y con qué frecuencia se deberá realizar un análisis que variará según el objetivo que se persiga:
- Screening o despistaje para detectar de forma precoz enfermedades en función de la edad y siguiendo los protocolos de prevención establecidos (hipertensión arterial, diabetes, hipercolesterolemia...).
- Diagnóstico de patologías.
- Control evolutivo de pacientes ya diagnosticados y seguimiento de tratamiento.
Componentes Principales que nos Ayudan las Pruebas Bioquímicas de Sangre
- Glucosa: Mide el nivel de azúcar en sangre, fundamental para detectar y controlar la diabetes. Valores normales están entre 70 y 100 mg/dL; niveles superiores a 126 mg/dL en más de dos ocasiones indican diabetes.
- Urea y Creatinina: Indicadores de la función renal. La urea refleja el metabolismo proteico y la creatinina es un producto de la degradación muscular eliminado por los riñones. Valores normales de creatinina oscilan entre 0.6 y 1.3 mg/dL, y de urea entre 6 y 20 mg/dL. Elevaciones pueden indicar insuficiencia renal o deshidratación.
- Transaminasas (ALT/GPT, AST/GOT, GGT): Enzimas hepáticas que indican inflamación o daño en el hígado. Valores normales para ALT son 4 a 36 U/L y para AST 8 a 33 U/L. Elevaciones pueden deberse a hepatitis, consumo de alcohol o fármacos.
- Fosfatasa alcalina: Enzima relacionada con el metabolismo óseo y biliar. Valores normales entre 20 y 130 U/L. Aumentos pueden indicar enfermedades óseas o hepáticas.
- Bilirrubina total: Pigmento que refleja la degradación de hemoglobina. Valores normales entre 0.1 y 1.2 mg/dL. Elevaciones pueden causar ictericia y estar asociadas a enfermedades hepáticas o biliares.
- Colesterol y Triglicéridos: Lípidos en sangre que se usan para evaluar el riesgo cardiovascular. El colesterol LDL ("malo") elevado y triglicéridos altos aumentan el riesgo de infarto y accidentes cerebrovasculares.
- Electrolitos (sodio, potasio, cloruro, CO2): Mantienen el equilibrio ácido-base y la función celular. Valores normales: sodio 135-145 mEq/L, potasio 3.7-5.2 mEq/L.
- Proteínas totales y albúmina: Reflejan el estado nutricional y función hepática. Albúmina normal entre 3.4 y 5.4 mg/dL.
Principales Enfermedades Detectables
- Anemia: Detectada por niveles bajos de glóbulos rojos, hemoglobina y hematocrito, indicando deficiencias nutricionales o pérdidas sanguíneas.
- Diabetes mellitus: Diagnóstico basado en glucosa elevada en sangre en ayunas.
- Enfermedades hepáticas: Hepatitis, cirrosis o daño hepático evidenciado por elevación de transaminasas, fosfatasa alcalina y bilirrubina.
- Insuficiencia renal: Elevación de creatinina y urea indica deterioro de la función renal.
- Dislipidemias y riesgo cardiovascular: Colesterol y triglicéridos elevados señalan riesgo aumentado de enfermedades cardiovasculares.
- Procesos inflamatorios e infecciosos: Alteraciones en leucocitos y velocidad de sedimentación globular (VSG) pueden indicar inflamación o infección.
- Cánceres hematológicos: Cambios en el hemograma pueden sugerir leucemias u otros trastornos sanguíneos, aunque el análisis bioquímico no detecta cánceres sólidos de forma directa1.
Niveles Clave para Controlar en el Análisis Bioquímico
Parámetro |
Valores normales aproximados |
Indicaciones principales |
Glucosa |
70-100 mg/dL |
Control de diabetes y glucemia |
Creatinina |
0.6-1.3 mg/dL |
Función renal |
Urea |
6-20 mg/dL |
Función renal y metabolismo proteico |
ALT (GPT) |
4-36 U/L |
Daño hepático |
AST (GOT) |
8-33 U/L |
Daño hepático |
Fosfatasa alcalina |
20-130 U/L |
Enfermedades óseas y hepáticas |
Bilirrubina total |
0.1-1.2 mg/dL |
Función hepática y bilis |
Colesterol total |
<200 mg/dL (varía según perfil) |
Riesgo cardiovascular |
Triglicéridos |
<150 mg/dL |
Riesgo cardiovascular |
Sodio |
135-145 mEq/L |
|
Potasio |
3.7-5.2 mEq/L |
Equilibrio electrolítico |
Experiencia Personal
Hace 8 años se le detectó diabetes tipo 2 a mi papá, el tenía sobrepeso, por su trabajo casi nunca realizaba actividad física, el exceso de peso causa resistencia a la insulina, el comenzó con está resistencia lo cual presenta una afección en la que el músculo, el hígado y las células grasas no usan adecuadamente la insulina. Como resultado, el cuerpo necesita más insulina para que la glucosa pueda ingresar en las células. Al principio, el páncreas produce más insulina para cubrir el aumento de la demanda, pero con el tiempo deja de producir suficiente insulina y aumentan los niveles de glucosa en la sangre. Algunos de los síntomas que él presentó fueron la poliuria (aumento de la frecuencia urinaria), polidipsia (sed excesiva), pérdida de peso inexplicada y fatiga, por lo que decidió realizarse exámenes para de este modo saber exactamente que tenía.
En este caso, la necesidad del análisis bioquímico de la sangre fue clave para confirmar la diabetes, evaluar la gravedad y para monitorizar la respuesta al tratamiento. Por ello en nuestra familia nos realizamos controles y exámenes de sangre regularmente para así detectar cualquier enfermedad o alteración a tiempo.
Referencias
Editorial Médica Panamericana. (2025). Análisis de sangre: guía práctica para su uso e interpretación. Editorial Médica Panamericana.
Cárdenas-Roldán, J., et al. (2022). Actualización en el diagnóstico bioquímico de la enfermedad de Wilson. Revista Médica, [volumen](número), páginas. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMCxxxxxxx/
Ediciones Mawil. (s.f.). Bioquímica clínica para ciencias de la salud. Ediciones Mawil.
Gerulewicz-Vannini, D., & Hernández-Andrade, E. (2005). Pruebas bioquímicas en sangre materna para la identificación de fetos con riesgo de defectos cromosómicos y complicaciones asociadas al embarazo. Perinatología y Reproducción Humana, 19(3), 163-170. https://doi.org/10.xxxx/perinatol.2005.03.005
Boyero, D. M. (2021, 27 septiembre). Análisis de sangre, ¿qué detecta?: resultados y enfermedades. Canal Salud-IMQ. https://canalsalud.imq.es/blog/analisis-de-sangre