1. Delimitación profesional
Los límites en la práctica clínica definen claramente el rol del fisioterapeuta, estableciendo qué competencias le corresponden y cuáles deben ser derivadas a otros profesionales de la salud. Esto evita el intrusismo y garantiza una atención especializada dentro del marco legal y académico.
2. Relación terapeuta-paciente
Mantener límites claros fortalece la relación con el paciente, basada en el respeto, la confianza y la confidencialidad. Esto implica actuar con ética, respetar la intimidad del paciente y evitar cualquier tipo de conducta inapropiada o invasiva.