La comunicación para el desarrollo, desde la perspectiva de la Comunicación para el Cambio Social, se concibe como un proceso que busca empoderar a las comunidades mediante la participación activa y el diálogo. Según (Gumucio, 2011). Este enfoque enfatiza que la comunicación no es simplemente un medio para transmitir información, sino una herramienta esencial para promover la transformación social y cultural. Se centra en la inclusión, el respeto por las identidades locales y la promoción de la equidad y la justicia social, asegurando que las voces de los sectores más vulnerables sean escuchadas y valoradas en los procesos de toma de decisiones.  En este contexto, la comunicación se considera un bien común y un derecho fundamental, crucial para el bienestar social y la mejora de la calidad de vida de las personas.

Gumucio, A. (2011). Comunicación para el cambio social: clave del desarrollo participativo. Signo y Pensamiento, XXX(58), 26-39.