Ambas frases nos invitan a meditar sobre la trascendencia del lenguaje en la vida humana, no sólo como herramienta de comunicación, sino como un cimiento de la convivencia social y expresión de la cultura.
La primera afirmación "El lenguaje es un medio poderoso de comunicación social, sin este, la vida, sería imposible e impensable", nos plantea una verdad contundente: sin lenguaje, no habría posibilidad de organizar lo humano. No solo la vida sería impensable, sino también inarticulada, sin relato y sin memoria, ya que la comunicación es intercambiar ideas, sentimientos pensamientos y al no tener esto en nuestras vidas no podríamos compartir con los demás nuestras ideas o pensamientos y viceversa los demás no podrían compartir con nosotros causando así que no se genere nada.

La segunda frase “Escuchar con atención, hablar correctamente, escribir con propiedad, son condiciones básicas de todo hombre culto para la convivencia social” resalta la tríada fundamental en la comunicativa: escuchar, hablar y escribir, vemos la variedad que tenemos para comunicarnos, y que en cada una de estas debemos tener cuidado la manera en la que vamos a compartir nuestras ideas, ya que pueden ocurrir que exista un mal acto de comunicación . Lo que esta declaración reivindica es el valor de la expresión clara y respetuosa como signo de civilización y cultura. El lenguaje, aquí, no se presenta sólo como un medio, sino como una forma de ser y estar en sociedad.