LAS MINICOMPUTADORAS
Las minicomputadoras, lejos de su imagen de pequeñez, son dispositivos mucho más grandes que una computadora de escritorio, más cercanas en tamaño a pequeños mainframes, y son utilizados para el manejo de grandes volúmenes de información, al igual que estos.
Podría decirse que las minicomputadoras son un tipo específico de computadora multiusuario, ubicadas, en términos de proceso computacional, entre los grandes sistemas multiusuario del tipo mainframe y las computadoras, estaciones de trabajo y sistemas de datos monousuario, como nuestra propia PC.
Sin embargo, a pesar de estar emparentadas con los mainframes por capacidad, lo cierto es que no ofrecen el mismo nivel de procesamiento. Nacen en la década de 1960 de la necesidad de contar con un sistema de cómputo de bajo costo, comparándolo con un mainframe, y de bajo mantenimiento, respecto al número de especialistas para operarlo como al personal técnico para repararlo.
Características de las minicomputadoras
En términos generales una minicomputadora es un sistema multiproceso, es decir, que puede realizar múltiples procesos en paralelo, y es capaz de resolver las peticiones de más de 200 usuarios de forma simultánea. En comparación con los varios miles de usuarios que puede gestionar un mainframe, 200 parece una cifra bastante pobre, pero no debemos olvidar que fue diseñada con el propósito de abaratar costos y personal para que el poder de procesamiento de un mainframe fuera accesible para empresas que no contaban con los recursos necesarios para tener instalado uno de estos gigantes en planta.
Respecto a sus características, una de las primeras cosas a destacar es que en su época las minicomputadoras fueron diseñadas, además de ofrecer equipos de alta potencia a costos más reducidos que los de un mainframe, para ofrecer una forma sencilla de conectar instrumentos y herramientas científicas, así como otros dispositivos de E/S a través de una arquitectura simple. Esto ayudaba a que el sistema se programara en lenguaje ensamblador, además se diseñaron con transistores, lo que permitía numerosas ventajas respecto a las válvulas, las que además añadirían el problema del tamaño y el consumo eléctrico.